En la Galería Berruet, Javier Puértolas presenta una exposición muy interesante bajo e! título general de «Espacios y frutas», un ensayo insistido, una indagación actual sobre la naturaleza muerta, para entroncarla en la luz, en el presente, en el instante vivo. Con una serie de variaciones casi infinitas nos muestra, de modo plástico y multicolor, las posibilidades —las certezas más bien—, que tiene el bodegón concebido al modo clásico para encontrar nuevos caminos, proyecciones luminosas e iluminadoras, fuerza expresiva y operante de contactos con la realidad. Su mayor mérito está tal vez en la gozosa y sensual salida triunfante hacia los espacios abiertos, en la inserción de las frutas, como esferas celestes, como símbolos de la naturaleza en continua evolución y en reproducción que no cesa, en el centro mismo de las cosas.
El profesor de la Teoría del Arte. Jesús Martínez Clara, lo expresa con absoluta claridad: «La representación de la naturaleza supone una reflexión sobre lo cambiante, sobre lo móvil y ese desafío de representar la vivacidad de lo natural no se suele encontrar en la pintura occidental, que acostumbrada a los modelos rígidos, no sabe captar ese momento más fecundo de toda acción… en esa dirección fascinante de lo inmediato se encuentra la obra de Javier Puértolas.
Al visitar la muestra se puede realizar una prueba muy curiosa, orientativa y didáctica: pasar de los bocetos, y dibujos sobre papel iniciales, un tanto neutros y agrisados, a la explosión de formas y colores de los acrílicos, que nos dan la medida exacta de la indagación y de la realización plena y exultante —espacios y frutas— a que aludíamos al principio.
Domingo Martínez Benavente
La Rioja, 29 Abril 1983
